CUANDO FUIMOS LOS MEJORES (20 años son muchos)
Me vais a permitir en esta nueva,
y tardía, entrega de RETINA BLANCA, rememorar desde una óptica más personal lo
que vivimos hace poco más de un año.
Sin mayor análisis deportivo.
Para todos los que seguimos al
equipo desde que tenemos uso de razón, y tenemos cierta edad además, nos hemos
comido la travesía del desierto, dando palos de ciego, estructural y
deportivamente, durante demasiado tiempo.
Yo tuve la suerte de vivir la
última Copa de Europa.
Abril de 1995, en La Muy Noble,
Muy Leal, Muy Heroica, Muy Benéfica, Siempre Heroica e Inmortal, ciudad de
ZaraGOZA.
Se mezclaban los capirotes y los
pasos de Semana Santa por la Plaza de España, con los perplejos aficionados
griegos (algunos blandiendo destornilladores del tamaño de una barra de pan,
por cierto).
Llegamos a Zaragoza, eliminando a
la Cibona en cuartos de final, al mejor de tres partidos.
Sobre aquellos tres días de
abril, poco que decir que no sepamos, la
pareja Sabonis-Arlauckas dominando en el parquet y Don Zeljko desde el banco;
junto a buen grupo de soldados.
Reseñar, eso sí, la castaña de trofeo.
Tanto tiempo buscándolo para
recibir una especie de mierda seca, digna de Eurovisión.
¿Cómo ha cambiado el producto,
verdad?
De lo que era la Euroliga a
mediados de los ´90 al espectáculo global que es ahora.
Afortunadamente, salvo Paris
1996, he vivido las últimas F4 en la que ha estado el club.
Zaragoza, Barcelona, Londres,
Milán y Madrid.
En Barcelona estaba como un niño
con zapatos nuevos (Respect al Don), como en una nube, y en esa semifinal
pecamos de todo; nos comimos los mocos bien comidos.
Recuerdo la noche tras la Final
de Londres.
En un más que “humilde” hotel cerca de Victoria Station…
Estaba vacío por la oportunidad
perdida, nos habían sacado a hostias (y a baloncesto) del partido.
Pardillos ON TOUR.
Y Milán.
El palazo supremo.
Algo así como el triple de
Solozábal, el quinto partido de la Final 96/97 y Charleroi 2004, TODO JUNTO.
20 años después, tras años de
desgobierno, abandono por parte del club (salvo honrosas excepciones), palos
deportivos de todos los colores y palos humanos también durísimos (Mariano,
Fernando e Ignacio DEP) nos volvimos a coronar en casa.
Un título que hacía por intentar
resarcir MUCHOS años de disgustos.
Ojalá no tengamos que esperar
otros 20 años.
Ganar una Euroleague es
extremadamente difícil, y cada año más.
A por ello.
ADELANTE REAL !!
PD: Mención especial a los que
siempre han estado ahí, a muchos abonados anónimos que aguantan desde el
Palacio antiguo y el “coqueto” Saporta, a @BSK_Foundation, a @PMBLOT… y a
@LAURA_CG66, por vivirlo, quererlo y sufrirlo.
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