Estado de emergencia


A principios de este mes escribía para esta misma web analizando los 100 primeros días de la era Benítez, y decía que a pesar de llegar invictos al mes de noviembre, en este mes íbamos a ver las verdaderas prestaciones del equipo, pues nos enfrentábamos a rivales fuertes como el Sevilla, el PSG o el Barça, y todos sabemos que las sensaciones con las que llegamos a diciembre son pésimas, pues de esos 3 partidos grandes sólo hemos ganado a los franceses y jugando horrorosamente. No obstante, las sensaciones que da el equipo son mucho peores que los resultados, porque aunque haya gente que ya dé la temporada por tirada, seguimos teniendo opciones de ganar todos los títulos, pues en Champions tenemos 13 puntos de 15 posibles y en Liga el Barça nos saca 6 puntos, remontadas más duras hemos visto en el mundo del fútbol, y si no que le pregunten a Capello.

Hay varios factores que explican la crisis de juego que vive ahora mismo nuestro equipo, para mí uno de ellos es la nefasta preparación física que tienen nuestros jugadores, no sabría decir si es por la pretemporada australiana entre actos publicitarios o si es culpa de Benítez, porque a este entrenador ya se le desplomó físicamente un Inter de Milán que venía de ganarlo absolutamente todo. Lo único seguro es que llevamos 15 lesiones musculares en 3 meses, número de lesiones que los especialistas ven normal para una temporada entera. Por tanto, me inclinaría a pensar que la desastrosa planificación física es culpa exclusiva de Benítez, y si a ello le sumamos el esperpento de servicios médicos que tenemos en el club y que nos deleita con sainetes como la lesión de Kovacic, a quien a pesar de que no podía jugar tuvieron varios partidos en el banquillo, el resultado es que Benítez no ha podido repetir once titular en lo que va de temporada, y cuando lo ha repetido nos metieron 4.

Otro problema es el espantoso estado de forma de algunos jugadores, me centraré principalmente en 2 de ellos porque es especialmente llamativo el contraste entre su magnífico papel que hicieron el año pasado contrastado con el patético papel que están haciendo este año, son Toni Kroos y Danilo. Toni Kroos nos maravilló a muchos el año pasado cuando Ancelotti lo colocó de 5 y durante los primeros meses de temporada hizo una temporada fantástica, hasta el punto de que el técnico italiano lo sobreexplotó hasta el punto de terminar la temporada absolutamente fundido. Jamás se ha vuelto a ver a ese Kroos de la primera mitad de la temporada pasada, no sabemos si porque entonces estaba más resguardado o simplemente porque se le acabó la gasolina y no ha sido capaz de rellenar el depósito.

Danilo es caso aparte, muchos pedimos su fichaje porque Carvajal no da ninguna garantía en el lateral derecho ni defensiva ni ofensiva, pero es que Danilo ha conseguido que echemos de menos a Carvajal, porque el lateral brasileño no ha hecho un partido en condiciones en lo que va de temporada, por no hacer no ha hecho ni un centro bueno, y si lo justificamos con la teoría de que cuando Konoplyanka o Neymar lo violaron, no fue ayudado por ningún mediocampista por esa regla de tres Carvajal tampoco era ayudado por nadie.

Pero solamente son 2 ejemplos de jugadores que son una sombra de lo que fueron, porque casos como el de Benzema y sus movidas extradeportivas que pueden acabar con sus huesos en la cárcel o Bale y sus preferencias por Gales o Isco que tan pronto se le va la olla con un entradón como se muestra indolente los 90 minutos y alguno más es para dedicarle un artículo completo. Únicamente salvo en lo que va de temporada a Keylor Navas, por sus espléndidas intervenciones que nos han salvado varios partidos, a Casemiro que ha sujetado en el mediocampo al equipo en muchos partidos, a James que ha cuajado grandes partidos lo poco que ha jugado, a Benzema que hasta su lesión y posterior movida extradeportiva era el máximo goleador del equipo y a los canteranos Nacho y Lucas Vázquez, que cuando han jugado ha demostrado que no son el jugador que más calidad tiene en la plantilla, pero sí pueden ser el que más cojones le echa, pues en su caso por pundonor no va a quedar, otros jugadores no pueden decir lo mismo, y eso le pese a quien le pese no es responsabilidad de Benítez.

Y por si todos esos problemas fueran pocos, hay bastantes jugadores que están en la cuesta abajo de su carrera, como es el caso de los capitanes y pesos pesados del equipo, caso de Sergio Ramos que, sigue dando recitales en muchos más partidos de los que nos muestra su gran calidad que exhibe a cuentagotas, aunque sería injusto que sus problemas de hombro le están lastrando mucho, a mi sí me parece de alabar que un jugador se infiltre para jugar, otros al mínimo dolor se borran con su equipo y fuerzan con su selección. El único capitán que en lo que llevamos de temporada ha realizado un papel bastante aceptable, es Marcelo que ha sido un puñal en varios partidos volviendo locos a muchas defensas rivales, además es el único jugador que no tiene un relevo claro, lo que le convierte en un jugador más imprescindible aún.

El caso de Pepe es un claro ejemplo de jugador en declive que es inexplicable que sigamos manteniendo en la plantilla, y el caso de Cristiano Ronaldo es un expediente X en toda regla, por el descomunal bajón que ha dado con respecto a la pasada temporada, así lo atestiguan sus cifras goleadoras comparadas, puede ser culpa suya o de Benítez que sitúa al equipo lejísimos de él, por lo que apenas le llegan balones, o simple y llanamente porque le pesan sus 31 años y sus problemas crónicos de rodilla, pero su declive empieza a ser alarmante y si es verdad que ha dado un ultimátum a Florentino dándole a elegir entre Benítez o él (lo cual pongo en duda porque de lo que dice la prensa me creo nada y menos), pero si eso fuese verdad vendía a Cristiano en invierno, y eso que como habrá quedado claro en este artículo me gusta muy poco Benítez, y cada vez creo más firmemente que el Real Madrid le viene grande. Si a todo ello añado que el quinto capitán del equipo, que sería Arbeloa apenas entra en las convocatorias, el panorama de los mandos del vestuario no podría ser más desolador.

En conclusión, a pesar de liderar el grupo de Champions con 13 puntos de 15 posibles y estar en Liga a 6 puntos del líder cuando quedan 78 por disputarse, las sensaciones del equipo son preocupantes por todo lo expuesto, pero no se puede dar todo por perdido, en primer lugar porque un Barça en un panorama parecido el año pasado por estas fechas acabó ganando el triplete, y sobre todo, porque somos el Real Madrid y si algo va intrínseco en nuestro ADN es nunca darse por vencidos, porque nunca debemos perder de vista que los títulos se ganan en abril y mayo, que nadie gana títulos en invierno, y los que se ganan tienen valor según las apetencias de cada uno, y si el entrenador nos cae antipático o simpático, como ocurrió el año pasado con el Mundialito de Clubes ganado por Ancelotti, al cual hoy reclaman los mismos que pedían su cabeza ipso facto después de los rídiculos contra el Shalcke o del Calderón.

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