Neymar montó una fiesta en plena concentración de Brasil en los juegos olímpicos. Alquiló una casa lujosa e invitó a todos sus compañeros de Selección. Quizás la fiesta fuera para que sus compañeros le apoyen ahora que es el capitán, pese a que había dudas con su capitanía. Sorprende que en plena semana importante, Neymar siga de fiesta cuando están a punto de afrontar un nuevo campeonato y los brasileños están cansados de tantos ridículos.
Muchas voces ya se han alzado contra Neymar, desde "faltas de respeto" a cuestionar que sea el capitán y ejemplo de los jóvenes jugadores que están a su lado.
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