Lo reconozco, no me gusta el fútbol.


Lo reconozco, no me gusta el fútbol. Es mas, me aburre soberanamente. Nunca he negado que a mi lo que me gusta es el Madrid. El fútbol como concepto, como deporte de entretenimiento, apartando los sentimientos y las implicaciones personales, me parece que fracasa estrepitosamente. Creo que nadie me puede negar que el 95% de los partidos son un auténtico coñazo.

No me puede interesar un deporte en el que cabe la posibilidad que concluya igual que empezó. ¿Imagináis un partido de baloncesto o de balonmano que termine empate a cero? ¿Una carrera de fórmula 1 en la que después de casi dos horas no existiera ganador?. No me puede interesar un deporte en el que existe la posibilidad de no dejar al contrario intervenir en el juego, monopolizando la posesión del balón con un absurdo juego defensivo de rondo sin fin. ¿Imagináis que Nadal hace un punto y se pasa el resto del partido dando toques a la pelota sin dejar que intervenga el contrario?. Un deporte en el que se puede sacar algo positivo sin intentar marcar.

Tampoco me puede interesar un deporte en el que se premia y se jalea la trampa. En el que, si ya de por sí es difícil la labor arbitral, todos y cada uno de los participantes se empeñan en no ayudar ni respetar la labor del juez principal. En el que el colegiado no solo debe decidir si las acciones que están sucediendo en el terreno de juego son susceptibles de ser interpretadas como faltas sino que también debe adivinar si el jugador que se retuerce y chilla como un cochino en matanza le está intentando engañar o no. 

Gatete visionando un apasionante Córdoba-Levante

No me interesa lo más mínimo un deporte con una reglamentación arcaica, que no ha sabido adaptarse a los tiempos, que no quiere, bajo ningún concepto, utilizar la tecnología para mejorar los arbitrajes, que no quiere, de ninguna de las maneras, objetivar el reglamento para que las decisiones en el terreno de juego no queden a merced de las opiniones del colegiado.

¿Qué se puede hacer? Utilizando ideas de otros deportes: Tiempo de posesión, expulsiones temporales, utilización del vídeo, rearbitrajes, objetivar la reglamentación (por ejemplo, todas las manos son manos), premiar con puntos los goles (esto ya se hace en eliminatorias, que un 2-0 vale más que un 1-0), dejar fuera del campo durante un tiempo determinado a los que se lesionen (se eliminarían los "fingimientos"), limitar el tiempo de juego en el propio campo, imponer el campo atrás, establecer medidas similares para todos los campos (¿imagináis a Usain Bolt corriendo los 100 metros en una pista de 110?), que el tiempo de juego fuera tiempo real (25 minutos parando en las interrupciones, por ejemplo) ... 

Supongo que todas y cada una de estas propuestas os parecerán una majadería, os parecerá una violación al espíritu más puro del fútbol, es posible. Pero ya lo he dicho muchas veces, a mi no me gusta el fútbol, me gusta el Real Madrid. Quizá ahora muchos entenderéis del por qué de mi ignorancia sobre este deporte.

Es lo que hay.

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