En los últimos tiempos, los veteranos de nuestro club nos están acostumbrando a continuas indirectas contra el equipo que les lanzó a la fama y al que tanto dicen querer, yo cuándo veo este tipo de declaraciones me pregunto, si realmente se creen lo que dicen, y en caso de que realmente se crean esas barbaridades, solamente me queda preguntarme si realmente han llegado a esa convicción con independencia o por sumisión a la empresa mediática que en ese momento les paga.
Voy a nombrar unos cuantos ejemplos, para recordar y especificar a qué tipo de declaraciones me refiero y desgraciadamente me veo obligado a escoger porque este tipo de intervenciones de nuestros veteranos en contra del equipo del que formaron parte han pasado a ser habituales y del que son miembros en la Asociación de Veteranos, por lo que de alguna u otra manera siguen ligado a él.
El último en despotricar contra su club en una tertulia televisiva fue Rafael Martín Vázquez cuando proclamaba a los cuatro vientos que Mourinho no ha aportado nada a la historia de nuestro equipo la memoria selectiva de este personaje llegó al punto que más de un contertulio de ese programa llegó a dudar de que su sentimiento madridista fuera real; otro veterano que pone de vuelta y media a su equipo continuamente en tertulias radiofónicas es Ricardo Gallego, que no pierde ocasión de “apalear” a su presuntamente amado equipo en cuanto tiene la más mínima oportunidad.
Otro veterano al que me voy a referir, cuyas intervenciones, en su momento, provocaron un tremendo enfado de muchísimos madridistas fue Iván Helguera cuando se quejó en twitter con duras palabras que el club no le hubiera concedido una entrada en la final de Lisboa, el exjugador cántabro acabó consiguiendo que el club le diera una entrada, lo cual provocó un lógico cabreo en todos los madridistas que sudaron sangre para ir a Lisboa, y especialmente para todos aquellos tanto socios como no socios a los que no les importó ir a la capital portuguesa aunque sea sin entrada, solamente con el único objetivo de acompañar al equipo sin intereses por medio. Por último, el propio Fernando Morientes antaño delantero centro de nuestro equipo y hasta hace escasos meses entrenador de un equipo de la cantera, en el pasado partido entre Alemania y España en Balaídos se reía de Sami Khedira junto con sus compañeros de tertulia.
Elegí varias intervenciones polémicas de veteranos del Real Madrid, en las que lanzan indirectas contra el club al que dicen querer, pero sería injusto generalizar con todos, por lo que también quiero destacar a exjugadores que defienden su club por encima de todo y precisamente por eso en los medios de comunicación convencionales sus apariciones son escasas, caso de Santillana o del exportero Agustín, cuya reciente intervención en Radio Marca fue épica cuando atacó a Casillas acusándole de defender a su equipo muy pocas veces y reprochándole no defender a su compañero Diego López cuando tuvo que soportar una campaña mediática vomitiva y durísima.
Por último, hay determinados veteranos como Manolo Sanchís, “Guti”, Buyo o Camacho que también siguen el juego a los periodistas para intervenir con ellos en sus programas radiofónicos o televisivos, pero que se enorgullecen públicamente de su sentimiento madridista y pocas veces siguen las campañas mediáticas, que los periogolfos de turno deciden imponer a favor de determinados jugadores (recuerdo a Manolo Sanchís replicar a Juan Carlos Rivero en la vuelta de la semifinal de Champions ante el Borussia en 2013, que Diego López no recuerda a Casillas en su impresionante paradón que realizó aquel día a Gundogan ya que cada portero tiene su estilo y no tiene sentido compararlos) o el inolvidable momento en el que Camacho cantó el gol de Bale en la final de Copa antes que el balón entrara.
En este repaso he omitido intencionadamente al inventor de la frase que da título a este artículo, que no es otro que el seleccionador Vicente Del Bosque, quien se considera hijo del Real Madrid, pero se permite el lujo de rechazar la máxima distinción que concede el club despreciando a todos sus aficionados por su rencor con el presidente, desprecios que han sido permanentes manifestados en desplantes como ausentarse del funeral de Di Stéfano o pasarse toda la temporada pasada intentando imponer que el portero titular fuera su niña bonita menospreciando día si día también a un portero como Diego López, canterano, español y seleccionable como el que más.
Ante este desolador carrusel de intervenciones de exfutbolistas de nuestro equipo contra su presunto equipo del alma, solo nos queda admirar a aquellos que no venden su sentimiento al mejor postor aunque ello les suponga no participar en tertulias mediáticas e igualmente admirables son aquellos que aunque colaboren en los medios no se dejan manipular por ellos sin jamás renunciar ni ocultar su madridismo, y en cuanto a los veteranos que venden su opinión y su sentimiento a cambio de un sueldo solamente espero que cuando dejen de trabajar para dichos medios no vuelvan al club pidiendo entradas o privilegios, porque los trabajos son temporales pero el sentimiento es eterno, y si no estamos con el equipo en las malas no deberían ser acogidos en las buenas.
Quiero concluir haciendo mío un tweet reciente de @TonySopranoRM que decía que, viendo las actitudes de muchos canteranos del Real Madrid, prefiero sin dudarlo a futbolistas mercenarios, para unos y, profesionales para otros, ya que por lo menos ellos no dan lecciones de madridismo ni se creen por encima del bien y del mal.
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